

La pasamos super genial, su familia fue muy cariñosa con nosotros y conversadores. Le tomamos muchas fotos a Dulce aunque es una pequeñita inquieta, olía todo a su alrededor. Pero no se dejen engañar por su tamaño, ningún perro grande le intimidaba.
Si le decíamos "Dulce ¿Quieres?"
volteaba automáticamente con los ojos muy abiertos. Le encanta el
cariño y es muy sociable. Sin duda Dulce se dejó hacer fotos geniales
mientras disfrutaba el paseo; esa es la idea de las sesiones woof, que
disfruten ellos del parque y sus familiares luego de las hermosas fotos.
Les dejo algunas de las mejores fotos ¡Disfruten!








